"Mi hija sufrió heridas en las piernas, y la llevamos al hospital Masvernat, pero allí la despacharon muy rápidamente porque decían que eran heridas leves", relató la madre de la joven atropellada, quien solicitó que la identificaran con su nombre de pila: Carmen.
Según detalló la mujer en la denuncia policial, el accidente ocurrió el sábado pasado en la esquina de Nogoyá y la ruta 4, de la ciudad de Concordia.
"Yo no estuve en el lugar en el momento del accidente, pero los vecinos afirmaron que el conductor intentó abandonar la escena del hecho. Pero no pudo marcharse porque el automóvil quedó averiado y no se podía mover", relató Carmen.
La mujer explicó que los vecinos "pedían a gritos que le hicieran un análisis de alcoholemia al conductor del automóvil que atropelló a mi hija".
"Un funcionario, que sería un colaborador cercano del gobernador, nos llamó por teléfono en días posteriores y nos dieron buena atención en el hospital Masvernat", afirmó Carmen.
La niña recibió siete puntos en una de las rodillas y curaciones en la otra pierna, debido a que quedó quemada por el arrastre que sufrió en el accidente. Al ser consultada por LA NACION, la madre de la adolescente atropellada dijo que el citado funcionario le ofreció una suma de dinero, pero que ellos lo rechazaron.
"Nosotros no queremos dinero; lo que pedíamos era que atiendan a nuestra hija porque la habían despachado muy pronto del hospital. Ahora mi hija sí está bien atendida en el hospital", dijo, casi a modo de agradecimiento.
Según el testimonio de la mujer, los menores "intentaron escaparse, pero no pudieron, porque el automóvil quedó dañado por el choque".
Además, la madre de la joven accidentada indicó: "Había dos testigos. Un hombre que dijo que iba a declarar y una chica, que fue la que me dijo que era el hijo del gobernador, que no sé si va a declarar porque dijo ser cercana a la familia de Urribarri".
"El chico venía con amigos en el automóvil de la madre; eran todos menores", dijo Carmen.
La mujer consideró que le resultaba extraño que el conductor del automóvil no haya visto a su hija porque "la moto del tío de mi hija es grande. La gente pedía, gritando, que le hagan un control de alcoholemia, pero no lo hicieron".
Fuentes policiales informaron que, hasta anoche, el automóvil que supuestamente conducía el hijo del gobernador no había sido secuestrado por la Justicia para que se realizaran los peritajes correspondientes, a raíz de la denuncia que hizo la madre de la adolescente.
Además, desde la Justicia tampoco se confirmó si se había iniciado un sumario para tratar de deslindar las responsabilidades de las personas señaladas por la madre de la adolescente en la denuncia que presentó.
