Según Ceferino Ragone, director de Parques y Paseos de la Municipalidad, "el intendente Enrique Cresto impulsa el embellecimiento de la ciudad, y así como estamos trabajando en las plazas, también lo hacemos en esta importante avenida de ingreso a la ciudad".
La idea responde a "embellecer uno de los accesos a la ciudad, como así también cumplir un rol importante desde lo ambiental, porque hablamos de la reforestación del casco urbano".
El dilema de la especie
Ragone precisó luego que el álamo "es una especie muy noble, por lo que queremos pedirle a la comunidad que los cuide porque estas acciones se hacen con el esfuerzo de todos". Pero unos cuantos kilómetros al sur, más precisamente en Concepción del Uruguay, el uso de estos árboles despertó polémicas en las agrupaciones ambientalistas. Todo comenzó cuando comenzaron a ubicar esta flora en la Isla del Puerto. Mario Rovina, integrante de la ambientalista Comisión Asesora Local (CAL), aseguró que "el álamo, nombre vulgar para un grupo de especies de árboles originarios del Hemisferio Norte, pueden transformarse en invasoras y desplazar las especies nativas, afectando la Isla de Puerto y zonas adyacentes, por lo que no es una especie apropiada".
Sin embargo, la polémica está instalada porque la isla uruguayense "es una Reserva Natural declarada por Ley provincial, cuyo fin es resguardar el Patrimonio Natural", mientras que la avenida Frondizi es poco más que un ingreso a la ciudad de Concordia.
