El joven, identificado como Víctor Andrés Rueda, volvía a su casa por calle Isthilart y, media cuadra antes de llegar a Pedro Duarte, fue abordado por dos sujetos que se trasladaban en moto y, aparentemente, tras intentar robarle el celular, lo mataron de un balazo.
El supuesto intento de robo ocurrió alrededor de las 16,30. El joven Rueda fue trasladado de urgencia al hospital Masvernat, donde falleció poco después de las 19.
El balazo le afectó la zona derecha del tórax.
El subjefe de Policía de Concordia, comisario Carlos Pérez, expresó a diario NOTICIAS que se está tras los pasos de un evadido de la unidad penal de Concordia, de 28 años, de quien se sospecha sería uno de los integrantes del dúo que atacó al joven Rueda.
Los dos que llegaron en moto habrían preguntado por una casa a un vecino, como si no fueran de la zona, relató el comisario Pérez. Poco después se cruzaron con el joven Rueda y se escuchó un disparo que le impactó en el costado derecho.
De Esteban Alanís a Víctor Rueda
Los vecinos expresaron su indignación por la falta de seguridad, ya que a plena luz del día, en la vereda, un joven cayó herido de muerte a media cuadra de su casa, como si la ciudad fuera una zona liberada para el delito.
El hecho trajo a la memoria de los concordienses otro asesinato que tuvo por víctima a un joven, Esteban Alanís, ocurrido en febrero del año 2013. A Esteban quisieron robarle la moto y terminaron matándolo de un balazo en la espalda.
Tras aquel dramático hecho que generó un potente y unánime reclamo social por la seguridad, el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, se hizo presente en la capital del citrus para anunciar un "plan integral de seguridad" que incluía el sistema 911, una red de cámaras de videovigilancia, la creación de otra comisaría y hasta un helicóptero a disposición de la policía concordienses.
Un año y medio después, el 911 aún está pendiente, al igual que las cámaras, y del helicóptero no se tienen noticias.
