Leiva estaba oficiando de autoridad deportiva en la cancha de Victoria, donde el local recibía a Salto Grande y caía 1 a 0 en los últimos minutos. Cuando Victoria tuvo un tiro libre en ataque que quedó en la nada y parecía avecinarse el contraataque del hidroeléctrico, el 2 del decano, Nelson Sosa, reaccionó con una impotente patada hacia un rival.
El referee vio la acción, interrumpió el partido y sacó la tarjeta roja de su bolsillo, lo que fue percibido por el propio Sosa. El defensor, visiblemente furioso, reaccionó propinándole un cabezazo a Leiva y luego un golpe de puño antes de que un compañero suyo lo separe.
Como era de esperar, el partido fue suspendido. Desde la Liga Concordiense de Fútbol se adelantó que cualquier tipo de sanción al jugador violento "será resuelto por el tribunal de disciplina" de esta entidad.
Patada sin pelota y cabezazo a un árbitro en la Liga Concordiense
