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El Club Estudiantes Concordia realizó una campaña histórica: a pesar de que antes de que comience la temporada fue marcado como el plantel que pelearía con Echagüe por mantener la categoría y el segundo club con la "billetera más chica de la conferencia" (sólo por encima del de Paraná), durante el principio del campeonato sorprendió a propios y extraños y en la segunda mitad reafirmó la condición de equipazo que había adquirido, al terminar segundo en una durísima Conferencia Norte.

"Olímpico, San Martín, Quimsa, Instituto, Atenas y La Unión califican para ser incluidos en el lote de candidatos a llegar a la final. Regatas es otro que pretende estar bien arriba y Libertad, sin tanto dinero y nombres, no quiere ser menos. Estudiantes de Concordia, el único que por ahora apostará a jugar con cuatro extranjeros, y el recién ascendido Echagüe buscarán escapar de la zona tan temida" decía la prensa especializada antes que comience la temporada.

Así se ahondaba sobre el verde: "en Concordia confían en un DT (Laginestra) que saca agua de las piedras y en un grupo de nacionales que rindió en la anterior (Slider, Orresta, Marín y Malara) y en ser el único que por ahora intentará con cuatro foráneos. Estudiantes repite dos de alto rendimiento como Tucker (escolta) y Justiz (pivote) y sumó dos internos como el estonio Kitsing y Henriquez para que haya más lucha. La clave será la química, y que puedan aprovechar su localía que es muy fuerte". Comenzado el viaje, el primer partido fue una especie de señal. Ese 25 de septiembre el equipo de Concordia le ganaría por 94 a 88 en su propia cancha a un grande como Regatas. Sin embargo la emoción de la victoria se calmaría enseguida tras sendas derrotas en Corrientes contra San Martín, que ya se sabía candidato, y en Formosa contra La Unión.

Una cancha fortificada

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Terminada la primera gira tocaba debutar en el Gigante Verde ante Atenas, y el local supo hacerse fuerte ante el griego y lograr que su gente festeje ese 79 a 73. El récord quedaba 2-2, pero la llegada del otro cordobés (Instituto) le propinaría una nueva caída al equipo concordiense: fue 71 a 58, con Estudiantes desaparecido en la cancha y que no lograba hacer su juego. Hasta ahí parecía que, al igual que las últimas temporadas, iba a tener que padecer una gran irregularidad.

El 7 de octubre del 2016 sucedería un partido que quedará en la memoria del hincha: llegaba al estadio de San Luis y Santa María de Oro un San Martín de Corrientes que estaba invicto (3-0) y que apabullaba al que se cruce, de local o de visitante. Pero el local mostró los dientes, propuso su juego y Laginestra supo plantear un partidazo para que el candidato sólo parezca uno más del montón. Estudiantes ganaría 89 a 78 ante el puntero y pondría su propio récord 3-3.



Desde esa fecha comenzaría una racha de local histórica que logró convertir al Gigante Verde en un bastión inexpugnable. Desde el triunfo ante San Martín ese 7 de octubre hasta el 15 de febrero, cuando caería contra San Lorenzo, Estudiantes no perdió de local. Volvieron de Concordia con las manos vacías, en orden cronológico y por la primera fase: Olímpico (105 a 84), Regatas (90 a 69), La Unión (91 a 72), Libertad (77 a 64), Quimsa (80 a 74) y Echagüe (86 a 77).



Eso no significa que el verde se achique en rodeo ajeno, ya que logró grandes triunfos de visitante como ante Instituto y Quimsa. Así, culminada la fase de Conferencia, alcanzaría la hazaña inolvidable de clasificar al Súper 4.
Reafirmando la promesa

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Luego del receso por las fiestas, al verde le tocaría jugar el Super 4. En el certamen realizado en Corrientes cayó ante el mejor equipo de la Conferencia Sur, San Lorenzo, por 83 a 78 en un partidazo. Más tarde, el conjunto de Almagro aplastaría a San Martín y se consagraría campeón.



Ya entrada la fase nacional, Concordia seguiría siendo una fortaleza: Regatas (94 a 81), Quimsa (100 a 77), Olímpico (84 a 75), Boca (84 a 76), Echagüe (94 a 65), Quilmes (79 a 78), La Unión (94 a 65) y Libertad (85 a 73) visitaron la costa del Uruguay y se volvieron con las manos vacías. San Lorenzo, rival al que el verde no pudo vencer en la Liga Nacional, se transformaría entonces en el segundo equipo en lograr una victoria en Concordia durante la temporada. Con 17 partidos jugados en la capital del citrus en 15 triunfó el anfitrión, convirtiendo al Gigante Verde en la mejor localía del país.

En la ruta, mientras tanto, seguiría siendo un hueso duro de roer. Venció a domicilio, entre otros, a Ferro, Peñarol, nuevamente a Quimsa y a Gimnasia de Comodoro Rivadavia.

El 29 de abril sería otra fecha difícil de olvidar. El verde recibiría a Hispano Americano de Río Gallegos, plantel que le propinó un partido durísimo y que sólo dejó de buscar la victoria cuando sonó la chicharra final. La victoria sería por 84 a 79 y así Estudiantes conseguiría confirmar su clasificación directa a semifinales junto a San Martín de Corrientes. Llegado el final de la temporada, sólo Instituto, San Lorenzo y Obras pudieron ganar en el Gigante Verde. Un saldo apabullante de 25 triunfos y tres derrotas. De gira el récord obtenido de 13-15 es un número difícil de lograr en un torneo que llevó a viajar al plantel miles de kilómetros. Los 38 triunfos y las 18 caídas obtenidas durante la temporada determinarían que Estudiantes termine la fase regular en segundo lugar, dos victorias por debajo del gallo correntino.

Con la victoria 81 a 72 en Formosa ante La Unión, sucedida el 12 de mayo, el equipo de Concordia concluyó una fase regular de ensueño. Durante el año consiguió tapas de revistas, halagos por su juego y su circulación de balón, olvidando por completo ese objetivo puesto a principio de año: evitar el descenso.



Artífices


Esta hazaña tiene responsables. Darquavis Tucker, alero, culminó como goleador de La Liga (21,6 de promedio y 23,5 de eficiencia) y se metió sin dudas en el top3 de la temporada. El estadounidense tiene un juego descarado, atrevido, y un manejo del balón eximio que lo convierte en tirador, penetrador y luchador. Todo condimentado con una inteligencia que lo hace parecerse un Argentino que nació en una tierra equivocada.





Junto a él aparece una apuesta caribeña que demostró el temple y la confianza de Hernán Laginestra: Javier Justiz Ferrer. Durante sus inicios con la camiseta verde, el joven parecía torpe, despertó insultos de los más impacientes y preguntas sobre si realmente iba a funcionar, pero el entrenador lo siguió manteniendo y esperó su explosión. En su segunda temporada en Concordia, explotó: se convirtió en un pivot imparable, que convirtió todo lo que le tiraban a la pintura. Promedió 2,17 bloqueos (segundo mejor taponador de La Liga), 8,8 rebotes y 5,7 dobles.





Los nacionales no aparecen en los grandes números, pero sin dudas que fueron el alma de un equipo que encontró el mix justo de actitud y calidad. Marín, Giorgi y Slider mantuvieron una efectividad eximia desde donde se pidió: Marín volcado a las penetraciones y al sacrificio sin renegar los tiros de larga distancia, Giorgi más inclinado a los triples pero también siendo el culminador de las jugadas de equipo y Slider siendo el artillero por excelencia de Estudiantes.





Junto a ellos aparecen aportes que, a veces, pasan desapercibidos. Orresta y Vildoza no aparecen destacados entre los mejores bases del país, aunque quizás el público olvide que son dos sub23 que juegan entre los grandes como si fuesen habitués de La Liga.

El "pájaro loco" quizás no posea una gran técnica de tiro, pero sí posee un gran ingenio que le permite estar siempre entendiendo la jugada, un sacrificio que le permite conseguir robos y un aprovechamiento de espacios gracias a su gran manejo de la pelota en sus manos y su importante salto. El otro tucumano, en tanto, no posee el control de su compañero pero complementa con una interesante efectividad desde el perímetro que ha aportado de buena manera al goleo del verde. Ninguno de los dos negocia la actitud: siempre dejan todo y le brindan electricidad al equipo.







Con esta fórmula, acompañada de un experimentado Malara que cumple las funciones de segundo director técnico del equipo al hablarle todo el tiempo a sus compañeros, Estudiantes demostró que está para ilusionarse. Sobre todo con un director técnico como Hernán Laginestra, que saca lo mejor de cada jugador y propone defensas impasables.

Fechas y horarios

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La Liga Nacional de Básquet aún no definió la fecha en la que se jugarán las semifinales de conferencias, pero sí adelantó cuándo se juegan los cuartos de final.

El lunes 22 se jugarán los primeros puntos de cada serie: por TyC Sports se podrá ver Bahía Básket vs. Quilmes, y al mismo tiempo se enfrentarán Argentino vs. Gimnasia, Regatas vs Libertad y Olímpico vs Instituto. De esta última llave saldrá el futuro rival del verde concordiense.
Resumen de Estudiantes vs Regatas - 7/12/2016
Fuente: elentrerios.com

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