Al respecto, el activista indicó que en la presentación dijo con sus palabras lo que se informó por escrito cuando inició la denuncia por apremios ilegales y tortura. En ese sentido, Zalisñak apuntó que tiene la esperanza «de que la fiscal ante mi testimonio, más evidencias que se aportaron en registro de imágenes y otros soportes, pueda avanzar para imputar a alguien, ya que todavía no hay ningún imputado».
Cabe recordar que en la madrugada del 3 de agosto funcionarios de Gendarmería reprimieron a los activistas que estaban apostados en la margen de la ruta nacional 15, rechazando el paso de cuatro camiones vibradores que se usarían en Uruguay para realizar fractura hidráulica.