Al hablar con los vecinos sobre lo sucedido, se logró identificar al autor del hecho, un hombre de 43 años que al ser identificado invitó a los policías a ingresar a su terreno y relató lo sucedido.
El hombre adujo que mientras realizaba tareas en el frente de su domicilio, el pitbull se volvió contra sus canes y su persona; por lo que reaccionó ante el ataque y, como el can no soltaba a su pequeña perra, buscó el arma y le efectuó varios disparos, tras lo cual el animal murió.
Tras el relato, entregó de manera voluntaria una pistola calibre 9mm, marca BERSA, Modelo THUNDER 9PRO, con cargador para quince cartuchos del mismo calibre contando la misma con solo nueve; y las documentales pertinentes.
El Fiscal en turno, Dr. Fabio Zabaleta, considerando la negligencia y la documentales del arma de fuego, ordenó el secuestro de la misma y de cinco casquillos percutados, al tiempo que dispuso la realización del dermotest al hombre, el cual no fue detenido.