En febrero próximo, el sacerdote se hará cargo de la Parroquia "San Cayetano" de Villa Zorraquín. Teniendo en cuenta la cercanía con La Criolla, muchos feligreses organizaron un apoyo popular levantando firmas y pidiéndole al Obispo que el cura, además de estar en Villa Zorraquín, siga atendiendo esa localidad del Departamento Concordia.
Consenso
La decisión de los feligreses fue acompañada por muchas instituciones del pueblo que vienen apoyando este cambio rotundo que se dio en la ciudadanía desde la llegada del padre Galarza.
Tanto es así que las propias autoridades políticas del pueblo manifestaron públicamente, hace unos días, que harán todo lo posible para llegar con las notas al Obispado de Concordia, pidiendo por "Moncho".
Carisma, participación y transformación
A su muy particular carisma con el pueblo, el cura se ganó el respeto cuando los hechos de inseguridad agobiaban el pueblo. Organizó y planteó el tema de la seguridad invitando humildemente a autoridades de distintos estamentos a la Capilla San Bonifacio y, desde ahí, salió la decisión del comisario Gustavo Schierloh, jefe Departamental de Policía, de reemplazar a los jefes de la Comisaría de La Criolla.
Además de su compromiso social notorio, el padre Moncho transformó la manera de asistir a la misa, dándole un sentido participativo a las celebraciones. Su decisión de oficiar misa, "en cualquier lado, o en cada esquina del pueblo", hizo ver un acercamiento de la Iglesia a los feligreses.
